La vida es una sucesión rápida y continua de decisiones. Las opciones que vamos tomando, los interruptores que pulsamos, las manijas que giramos, resuenan en nuestra vida y en la de los que nos rodean, configurándolas, y, al final, definen lo que somos. Y todo cuanto somos y lo que hemos vivido está aquí, en nuestras conciencias. Esos momentos juntos, paquetes discretos de felicidad que habitan dentro de nosotros, son la fuerza invisible que nos mantiene unidos. Y que nos anima a seguir andando.
Lo mejor de la vida es la risa. Si te pones a pensar los mejores momentos de tu vida seguro que te estabas riendo. El otro día comentaba con Rachel que la gente debe pensar que soy tonto o por lo menos que estoy loco, porque muchas veces cuando ando por la calle sólo me entra la risa sin razón aparente. Y es por que me acuerdo de algo que ha hecho mi gato, de algo que me ha pasado, de alguna anécdota de la facultad,... cualquier cosa que me hace irremediablemente reírme.
Estoy pensando que lo único que tubo de bueno la facultad fueron los momentos geniales que vivimos riéndonos de todo en clase, en el laboratorio, en el campo,... eran lo mejor.
Tienes razón. Yo a menudo recuerdo anécdotas y momentos vividos en los incomparables años de la Facultad (con énfasis en lo de incomparables, porque no creo que volvamos a vivir nada parecido), y no sólo es cierto que en los mejores momentos nos estábamos riendo, sino que además no puedo evitar alguna risita o incluso carcajada, esté donde esté, cuando recuerdo algunas de esas cosas. A mí también me pasa eso a menudo, y siempre pienso que la gente que esté a mi alrededor debe creer que estoy zumbado (que además estarían en lo cierto).
Bonita foto y buena reflexion. Dos generaciones compartiendo una risa!que gonito. Es verdad que hay pocas cosas mejores que compartir unas risas sinceras con la gente que te rodea y que aprecias
4 comentarios:
Lo mejor de la vida es la risa. Si te pones a pensar los mejores momentos de tu vida seguro que te estabas riendo.
El otro día comentaba con Rachel que la gente debe pensar que soy tonto o por lo menos que estoy loco, porque muchas veces cuando ando por la calle sólo me entra la risa sin razón aparente. Y es por que me acuerdo de algo que ha hecho mi gato, de algo que me ha pasado, de alguna anécdota de la facultad,... cualquier cosa que me hace irremediablemente reírme.
Estoy pensando que lo único que tubo de bueno la facultad fueron los momentos geniales que vivimos riéndonos de todo en clase, en el laboratorio, en el campo,... eran lo mejor.
Tienes razón. Yo a menudo recuerdo anécdotas y momentos vividos en los incomparables años de la Facultad (con énfasis en lo de incomparables, porque no creo que volvamos a vivir nada parecido), y no sólo es cierto que en los mejores momentos nos estábamos riendo, sino que además no puedo evitar alguna risita o incluso carcajada, esté donde esté, cuando recuerdo algunas de esas cosas. A mí también me pasa eso a menudo, y siempre pienso que la gente que esté a mi alrededor debe creer que estoy zumbado (que además estarían en lo cierto).
Bonita foto y buena reflexion. Dos generaciones compartiendo una risa!que gonito. Es verdad que hay pocas cosas mejores que compartir unas risas sinceras con la gente que te rodea y que aprecias
En palabras de George: "Gracias Muchachos".
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