Había un garito en Bronxtoles que se llamaba Parklife. Era de lo mejor del lugar, pero estaba regentado por unos niños de papa que se creían de lo más cool. Lo mejor era la música (Pearl Jam, Red Hot Chili Peppers, Nirvana, U2, Blur, Coldplay, Radiohead, Green Day,... y un largo etcétera de grupos de corte similar) y las dos camareras, pero eso es otra historia.
Resulta que organizaban fiestas, de vez en cuando, en las que cuando sonaba la canción Parklife de Blur (1994) invitaban a cerveza a todo el que la pedía. ¿Dónde estaba el truco?, en que las servían bailando y claro no les daba tiempo a servir muchas jarras.
Esa es la historia y aquí esta el clip.
La vida es una sucesión rápida y continua de decisiones. Las opciones que vamos tomando, los interruptores que pulsamos, las manijas que giramos, resuenan en nuestra vida y en la de los que nos rodean, configurándolas, y, al final, definen lo que somos. Y todo cuanto somos y lo que hemos vivido está aquí, en nuestras conciencias. Esos momentos juntos, paquetes discretos de felicidad que habitan dentro de nosotros, son la fuerza invisible que nos mantiene unidos. Y que nos anima a seguir andando.
2 comentarios:
lo recuerdo...que años aquellos...
Parklife. All the people...so many people...
Buena canción y buena historia para recordarla. Para las peleas que musica ponian?
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