domingo, 27 de septiembre de 2009

Soy realista: yo no soy un actor

Soy realista: yo no soy un actor, eso es lo que declaró en el día de ayer Pablo Pineda, todo un ejemplo de superación y de humildad. En 1999, se convirtió en el primer europeo con síndrome de Down que conseguía un título universitario. EL sábado logró un nuevo hito en la historia de las personas con discapacidad al ganar la Concha de Plata al mejor actor del Festival de Cine de San Sebastián por su interpretación en la película 'Yo, también'. Por primera vez, una persona con trisomía del cromosoma 21 alcanza el galardón en el certamen donostiarra, un premio que se ha visto ratificado con la Concha de Plata a la mejor actriz para su compañera de reparto, Lola Dueñas.

Pablo recuerda cómo, de pequeño, su curiosidad y su testarudez le llevaron a superar todas las barreras que, aparentemente, bloqueaban el desarrollo educativo de las personas como él.

Se matriculó en magisterio en 1995 y, dos años después, participó como ponente en el VI Congreso Mundial sobre el Síndrome de Down. En cuatro años, consiguió su título de diplomado y comenzó a desarrollar diversas actividades en el campo de la educación especial y el bienestar social. El pasado mes de marzo, ejerció de profesor en un colegio de Córdoba y, en la actualidad, está a punto de licenciarse en Psicopedagogía.

3 comentarios:

Totoro dijo...

Que alegría me das. Iba a publicar una entrada con el trailer porque me pareció que la película no tenia desperdicio. Pero espera a la clausura del Festival para hacerlo. Ahora al ver tu entrada, se asoma una sonrisa en mi cara.

Una verdadera joya la película (a pesar del imposible color de pelo del personaje de Lola Dueñas) y una verdadera pena no haber ido este año al Festival. Maldito calendario escolar!!!!

JugonTrucks dijo...

Gracias por tu comentario, espero que publiques una entrada sobre el festival aunque haya hablado ya sobre esta peli que si es verdad que tiene muy buena pinta. A parte, he leido muy buenas críticas de El secreto de tus ojos de Ricardo Darin

George dijo...

Este chico, si mal no recuerdo, era un caso de Síndrome de Down mosaico. Los mosaico se llaman así porque una parte de las células de su organismo están afectadas por la trisomía, y otra parte tiene una dotación genética normal. Habitualmente los mosaico suelen desarrollarse intelectualmente más que los que tienen la trisomía completa.

Ver a este chaval recogiendo el premio me llena de orgullo y satisfacción, usando la frase en serio. Al igual que ayer cuando vi en la versión británica de "X Factor" a un chico autista poniendo en pie a todo el público y jurado, micrófono en mano.