domingo, 30 de mayo de 2010

Arte Mundialista

La ESPN ha creado estos peculiares carteles para promocionar el Mundial de Sudáfrica 2010. Ha hecho uno por cada selección y la verdad es que algunos no tienen desperdicio.




sábado, 22 de mayo de 2010

Madrid 2010


Where is Totoro? (II)

Desde la dirección de Patógenos a la Deriva sentimos comunicaros que uno de los contribuyentes de este blog se encuentra actualmente desaparecido. Se rumorea que es tal su felicidad por el maravilloso Barça que ha decido abandonar el mundo moderno para aislarse en una playa de Lanzarote. También nos han llegado comentarios que nos afirman que está estudiando una especie de oposición, pero no sabemos contra quien. Informaros que hemos llegado un acuerdo con la marca de vino gran reserva, Pico de Oro, para colgar su foto en los cartones de litro con abre fácil. Totoro, si nos lees por favor, da señales de vida que estamos en un sin vivir en mi a través de nuestro propio cuerpo, si no quieres volver lo entenderemos pero sólo queremos saber que estás bien, con nosotros estarás mejor que en brazos.

The Final

Los que no hayan visto hasta el penúltimo capítulo que se abstengan de ver el primer video.



martes, 11 de mayo de 2010

El Año Perdido de Joaquin Phoenix

Desde que hace un par de años Joaquin Phoenix anunció que se retiraba del cine para lanzar su carrera como estrella del rap la cosa olía a chamusquina. Ahora, y tras meses de barrabasadas y salidas de tono varias, parece que todo era parte de un supuesto documental. Un montaje... ¿o quizá no?

I'm still here: the last year of Joaquin Phoenix (Todavía estoy aquí: el año perdido de Joaquin Phoenix), es el nombre de la criatura que explica el comportamiento del actor dos veces nominado al Oscar. Un presunto documental que ha estado grabando junto a su cuñado y amigo del alma Casey Afleck del que ya han trascendido las primeros detalles. Y no tienen desperdicio.

El documental recoge los momentos más álgidos de la deriva de Phoenix en su afán para convertirse en una estrella del hip-hop. Actuaciones bochornosas, insultos a sus compañeros (especial atención a despertado la escena en la que rechaza con muy malos modos un ofrecimiento de Ben Stiller) y colocones de todos los colores, públicos y privados, pueblan la película.

lunes, 10 de mayo de 2010

Las Serpientes Ciegas

Nueva York, 1939. Alguien acaba de llegar a la ciudad siguiendo la pista a un hombre, Ben Koch, que incumplió un pacto. Pero Ben anda embarcado también en una búsqueda frenética, la de un individuo llamado Curtis Rusciano. Lejos de allí, en España, la guerra civil está ya perdida para los republicanos, que se ven impotentes para prolongarla hasta que estalle una conflagración europea que modificará el mundo. Sin embargo, todo el universo de nuestros protagonistas se halla presidido por la urgencia en ajustar, durante estos días de sofocante verano, sus cuentas personales.

Este es el argumento de Las Serpientes Ciegas, el premio Nacional del Cómic del 2009 que lleva la firma de Felipe Hernández Cava. Muy recomendable

Clear Skies


¡Madrileños Impostores!

Das internationale Verbindungs Programm (I)


I - Der Himmel über die Herzen



Berlín, 8 de Octubre de 2125

Nunca me han gustado las colas para el control de entrada en los aeropuertos. Siempre me he sentido inferior, quizá humillado, servil, como obligado a aguantar las esperas de pie, el tedio y las malas caras de los policías por cometer el inmenso delito de querer entrar en su país. Es como si me estuvieran diciendo "Oh, extranjero, si quieres que te dejemos pasar a nuestra tierra te tienes que joder y pasar por todo este proceso". Entretenido en estos pensamientos, observando las caras de sueño de los otros viajeros y yo mismo bostezando a causa de la hora a la que me había despertado para coger el vuelo y el nulo descanso que había tenido a bordo del avión - los veinte minutos de Madrid a Berlín la verdad es que tampoco daban para mucho - llegó finalmente mi turno para pasar por el escáner ocular y suspiré como diciendo "por fin" cuando vi abrirse la barrera mientras oía el clásico mensaje de bienvenida, esta vez en alemán. "La próxima vez cojo el tren de presión cero", siempre pienso lo mismo y al final acabo volando. El tren de vacío es muy rápido y cómodo, y con menos molestias, pero volar tiene algo inigualable.

No es que dudara de la eficacia de los alemanes en todo lo que hacen, pero sí que es cierto que no esperaba esa sensación de ver que todo estaba perfectamente preparado y previsto cuando salí por la puerta de Llegadas del aeropuerto Schönefeld de Berlín. Ahí estaba una representante de la compañía esperándome, con su pantalla plegable con mi nombre y foto. Era una mujer joven, de unos 27 años, rubia y de fenotipo claramente alemán, pero hablando un muy correcto español. Su educación y profesionalidad iban acordes con el entorno, y además rezumaba una cierta simpatía, mayor de lo que esperaba. Tuve la percepción de que se esforzaban al máximo por hacer mi llegada agradable, por hacerme sentir cómodo y de algún modo especial.

- Buenos días, ¿Ricardo Martín?.
- Sí, ese soy yo. Buenos días.
- Bienvenido a Berlín. Soy Nina Timmer, encantada de conocerle.

A partir de ahí, todo fue rodado: del vestíbulo del aeropuerto al coche, que ya estaba esperando fuera, y de ahí al hotel, donde tuve una hora y media para acomodarme, dejar mi equipaje y darme una ducha. Después, ya de camino a la central, experimenté a bordo del Mercedes Benz de la empresa una sensación de solemnidad, de gravedad por momentos, que me hacía sentir en unas ocasiones como un influyente político siendo trasladado a la sede de su partido y en otras como un mando militar siendo evacuado a un cuartel secreto en una situación de emergencia. Doblamos por Unter den Linden hacia el Stadtmitte, encaminándonos después hacia Nollendorfplatz y por último Oranienburger Tor, donde estaba situada la sede central. Era un edificio exactamente como esperaba: de acero y vidrio orgánico, unos 35 pisos de altura y elevadores magnéticos exteriores por todas partes. Su forma era cilíndrica, de color azul oscuro, y se erigía imponente en una esquina de la plaza. El vehículo se detuvo justo delante de la entrada, y Nina bajó primero para abrirme la puerta.

La recepción era un espacio amplio, agradable pero aséptico, con las paredes de cristal líquido en las que se mostraban todo tipo de imágenes, textos y animaciones a los que no presté atención alguna. A pesar de que las circunstancias hacían esperable por mi parte una actitud de intentar absorber toda la información que estuviera al alcance de mi mano sobre la tarea que iba a desarrollar allí, de algún modo me sentía tranquilo porque imaginaba que llegado el momento me explicarían personalmente todo cuanto necesitase saber. De repente, la voz de Nina llamándome interrumpió mis pensamientos. Volví la cabeza y tanto ella como la recepcionista, una chica con rasgos asiáticos, quizá japonesa, de unos 19 años, me estaban mirando. La recepcionista sujetaba una tarjeta de identidad holográfica en la mano, por lo que asumí que había llegado el momento de pasar a la acción.

Nina me condujo por un pasillo elegantemente iluminado, con focos de colores azulados en los laterales, y se percató de que yo aún seguía mirando el enorme letrero plateado que se encontraba en el vestíbulo, y que rezaba "Liebe ist für alle da".

- Significa "el amor es para todos". Es un antiguo dicho alemán de primeros del siglo XXI - Nina aclaró mis dudas en un instante con una sonrisa, y añadió:

- No se preocupe, aprenderá el idioma antes de lo que piensa. De todas formas como ya sabe la lengua oficial en nuestro trabajo es el inglés, por lo que no tendrá problema alguno ni en el proceso de formación inicial ni para desarrollar su tarea.

Llegamos, tras subir varios pisos y andar por una serie de corredores, a una pequeña salita de espera con sillones de polímero adaptable, un dispensador de agua mineral y una pantalla.

- Le dejaré esperando aquí mientras voy a avisar a mi compañera de Introducción y Preparación para que venga a buscarle. La pantalla que tiene a su derecha tiene acceso a la televisión y a Internet, puede usarla libremente. Pulse el botón azul del videoteléfono que hay en la mesita si necesita cualquier cosa, y le atenderán enseguida.

- Muchas gracias.

Nina desapareció y la puerta se cerró tras ella. Aún estaba preguntándome qué hacer mientras esperaba (tenía esa sensación irracional de "mejor no toco nada", como si se esperase de mí que me estuviera quieto, a pesar de haberme dicho clara y amablemente que todas las comodidades que pudiera ver estaban a mi disposición), cuando otra mujer, un poco más mayor, de unos 35 años, tez morena y pelo negro, apareció por la entrada.

- Hola, señor Martín. Soy Kiruba Lindemann, pertenezco al departamento de Introducción y Preparación. Permítame darle la bienvenida a Das Internationale Verbindungs Programm. Yo seré su agente de inserción en el programa. Puede interrumpirme en cualquier momento para hacer cualquier pregunta que tenga, y si tiene alguna queja por favor hágamela llegar también a mí. Ah, y llámeme simplemente Kiruba.

Yo respondí mientras pensaba "¿Kiruba Lindemann?. ¿Qué clase de nombre es ese?", cosa que ella debió notar puesto que cuando terminé de hablar me aclaró que sus padres eran un hombre indio y una mujer alemana, que en su caso le había dado el apellido. Kiruba tenía un aspecto alegre, aunque sin perder ese destello de gravedad que poseían también Nina e incluso la recepcionista asiática, y que en general flotaba en el aire como una densa neblina que me impedía relajarme del todo.

- Acompáñame, por favor - dijo, haciendo caso a mi comentario acerca de dirigirse a mí de modo informal.

Seguí a Kiruba por varios pasillos hasta una salita insonorizada, con una pantalla de proyección holográfica, una mesa y varios sillones alrededor. Tenía, salvo por el pequeño tamaño, el aspecto de un salón de videoconferencias. Kiruba pulsó unos botones en la pared, la sala se oscureció ligeramente, y se sentó a la mesa, invitándome a hacer lo mismo. A continuación, empezó a hablar:

- Como ya sabes, Ricardo, te hemos seleccionado para ser Asignador en el Programa. Como también sabrás, Das Internationale Verbindungs Programm significa "El Programa Internacional de Conexiones". Es probable que sepas ya muchas cosas de nosotros, ya que se habla del Programa en televisión a todas horas, pero también es probable que una gran parte de todo lo que hayas oído no sea cierto, por lo que te explicaré en qué consiste desde el principio.

Asentí con la cabeza, totalmente inmerso en la conversación y expectante ante la información que estaba a punto de recibir. El desinterés que había estado mostrando hasta ahora se había esfumado por completo tan pronto ella había empezado a hablar. Kiruba prosiguió:

- A finales del siglo XXI la natalidad en todo el mundo comenzó a disminuir de forma lenta pero constante. Las causas son algo acerca de lo cual nadie se pone de acuerdo, pero está claro que muy probablemente fue una combinación de desconfianza generada por las enfermedades de transmisión sexual, por el aumento de la criminalidad en todo el mundo y por lo que llamamos Deriva Social. La Deriva Social, que desde aquel momento ha ido aumentando hasta convertirse en el problema que es en nuestros días, es un síndrome de aislamiento y apatía socioafectiva y sexual que afecta por igual a hombres y mujeres de todas las edades. El uso excesivo de la tecnología para la comunicación, la aceleración del ritmo de vida, especialmente en las sociedades occidentales, y los problemas que ello acarreó (estrés, exceso de trabajo, falta de tiempo para otras actividades) terminaron causando el aislamiento de los individuos y la extinción progresiva de las relaciones interpersonales cercanas, que hoy en día es casi total.

Yo continuaba asintiendo periódicamente, como haciéndole ver que ya conocía todo aquello, que aparece en todos los libros de Historia. Sabía que era su obligación contármelo, pero me irritaba en algunos momentos la idea de que pudiera pensar que no lo sabía. Mi irritación, sin embargo, no fue a ninguna parte puesto que ella continuó hablando:

- Esta Deriva Social empezó causando una reducción en la formación de parejas jóvenes potencialmente reproductoras, pero al principio no parecía un efecto muy importante. Después vinieron los divorcios, la reducción de las adopciones, y el efecto continuó incrementándose en cascada hasta que a principios de este siglo ocurrieron cosas impensables como el hundimiento de la industria del sexo. Ha sido en los últimos veinte años cuando la situación se ha convertido en crítica, la natalidad es mínima en Europa, ligeramente mayor en Asia y Oceanía pero en cualquier caso insuficiente, y próxima a cero en América del Norte y central. La población ha envejecido tanto que nos enfrentamos a la extinción en menos de 100 años, y ese es un dato optimista. Hasta aquí, el problema. Pero hablemos de la solución, ya que ahí es donde entramos nosotros.

Kiruba continuó, sin duda animada por mi expresión de interés al ver que empezábamos a hablar de lo que realmente me interesaba.

- En el 2094, una Comisión de Emergencia formada por los líderes de los países de la Unión Europea se reunió para tratar de encontrar una solución tan desesperada y radical como hiciera falta para este problema, ya que la reducción de las jornadas laborales, la mejora de la seguridad en las calles y las campañas promoviendo las relaciones sociales que se habían llevado a cabo durante años no tuvieron apenas efecto sobre la población. La Comisión tuvo una idea que posteriormente fue votada en el Parlamento Europeo y aprobada por unanimidad, y su puesta en marcha asignada a un consorcio de empresas de biotecnología que trabajan con fondos públicos y bajo supervisión de las autoridades. Y esos somos nosotros. Por orden de la Comisión de Emergencia sobre la Natalidad y en virtud de las leyes que se desarrollaron al respecto, desarrollamos el implante cerebral que hoy conocemos como Linker One.
Usando nanotecnología, construimos un dispositivo de menos de un milímetro de tamaño que se aloja en la región temporal del cráneo y se conecta por medio de materiales biocompatibles y una interfaz neuroeléctrica a la corteza cerebral y, sobre todo, al sistema límbico, responsable del control de las emociones.
El Linker One se ha estado insertando a todos los bebés recién nacidos en Europa desde la aprobación de las leyes que lo impulsaron, y se coloca mediante una simple inyección en el brazo. El implante se deposita así en el torrente sanguíneo y por sí solo se abre camino hasta el cerebro, donde establece sus conexiones cuando el Sistema Nervioso del individuo aún no está totalmente desarrollado, lo que le permite integrarse en él sin problemas ni rechazos. El Linker One incorpora una microantena, lo que posibilita la comunicación bidireccional con él vía satélite. La Ley establece que sólo puede activarse cuando el individuo cumple la mayoría de edad, por lo que, si haces cálculos, verás que sólo llevamos unos años usándolos de forma activa. Los resultados están siendo muy prometedores.

Kiruba hizo una pausa, que yo aproveché para interrogarla:

- Esto ya lo conocía a través de los medios, todo el mundo sabe lo de los implantes y para qué sirven. Pero la pregunta que tengo ahora mismo en la mente es ¿cómo funcionan realmente?.

- Exactamente, eso es lo siguiente que tienes que saber. El Linker One recaba información sobre la persona: sus gustos, costumbres, pensamientos, todo hasta un cierto límite establecido por las leyes de privacidad. Toda esa información pasa a la base de datos del Sistema, de modo que cuando vamos a activar un implante ya tenemos 18 años de información sobre el individuo grabada. En ese momento, empieza la tarea del Cuerpo de Asignadores. Su cometido es buscar, cruzando las bases de datos, un candidato del sexo opuesto conocido por el individuo y con las circunstancias y compatibilidad suficientes como para que una relación sentimental sea factible, y una vez encontrado, asignarles. Esto provoca la activación simultánea de ambos implantes, que modificarán el funcionamiento de sus vías de control emocional causando, finalmente, una atracción entre ambos. Es decir, restablecemos a través del Linker One el mecanismo natural que el ser humano ha perdido casi completamente en el último siglo.

- Tengo varias preguntas que hacer. Comprendo como funciona el sistema, pero ¿por qué simplemente no se aumenta la natalidad a base de fecundaciones in vitro y gestación artificial?. Se sabe que una parte de los pocos nacimientos que tenemos ahora es a través de ese método.

- Por varias razones. Lo primero, los Estados no pueden costear el procedimiento de gestación artificial de forma masiva, y no digamos ya la educación y manutención de todos esos niños hasta su mayoría de edad. Segundo, eso sólo solucionaría una parte del problema, pero después seguiríamos igual porque ¿cómo crees que se comportarían con las demás personas unos niños que han crecido sin progenitores ni ningún otro tipo de lazos afectivos?. Los niños hacen lo que ven. No estaríamos resolviendo nada.

La verdad es que era completamente lógico, todo encajaba en mi mente como piezas en un puzzle, salvo un pequeño detalle que me hacía cuestionarme la labor que había ido a desempeñar allí:

- Perdona que te pregunte esto, pero...¿por qué existe un Cuerpo de Asignadores?. Esa tarea parece algo bastante sencillo para una máquina con un software y unos algoritmos de cruzamiento adecuados.

Kiruba asintió antes de que me diera tiempo a terminar la pregunta, como si esperara que la hiciese, quizá porque no era la primera vez que la oía.

- Inicialmente se pensó en hacerlo de ese modo, ya sabes, para reducir costes. Pero lo que hacen los Asignadores es básicamente emparejar. Y creemos que no sirve con aplicar unos algoritmos de compatibilidad que se basen en cálculos estadísticos. Pensamos que para hacer esa tarea con las máximas garantías de éxito es necesaria inteligencia emocional. Y eso es algo que solamente puede aportar un operador humano. El sistema puede sugerir candidatos o candidatas, pero la última palabra siempre la tendrá el Asignador. Eso, por supuesto, también conlleva una responsabilidad, ya que los implantes no son perfectos ni anulan la voluntad del individuo, y en ocasiones hay rechazos o simplemente las cosas no funcionan. Son relativamente poco frecuentes, pero cuando ocurren requieren también la intervención de un ser humano. Y bien, ¿cómo lo ves?. ¿Te sientes preparado para pasar a la siguiente fase?.

Yo me encontraba entre emocionado y asustado. Aunque ya sabía a qué venía, hasta ese momento no había comprendido la magnitud de lo que iba a tener entre manos en su totalidad, y la idea me producía un cierto vértigo.

- Claro, sin duda. Estoy deseando empezar. Aunque puede que me surjan más dudas.

- No te preocupes, en ese caso consúltame a mí. Si quieres más detalles sobre el Linker One podrás hablar con los técnicos durante el proceso de formación o después una vez que estés en tu puesto. Ahora, como ya te comentamos antes de venir, tendrás que pasar unos tests psicotécnicos, además de un procedimiento de seguridad que incluye entre otras pruebas un neuropolígrafo. Después deberás firmar tu contrato y la Declaración de Ética Profesional, Secreto y Respeto a la Privacidad. Te explicaremos todos los detalles en su momento. Y terminado eso, podrás empezar la formación, donde aprenderás a usar el Sistema durante dos semanas, antes de comenzar a hacer asignaciones reales.

- Muy bien. Conforme con todo.

- En ese caso, sígueme, por favor.

Kiruba se levantó de la mesa y me hizo un gesto con la mano.

CONTINUARÁ

sábado, 8 de mayo de 2010

La Caverna Catalanista (IV)

El Barça contra España - Salvador Sostres

Si el Barça gana la Liga habrá ganado el mejor. El mejor equipo del mundo. Y si pierde continuará siendo el mejor equipo del mundo, y nadie podrá negar que su fútbol es superior a cualquier otro. Es lo mismo que pasa con el Madrid, pero al revés: si gana la Liga sólo habrá ganado la Liga, sin ser el mejor, y nadie dirá nada en particular de su fútbol.

Tanto si pierde como si gana la Liga, el Barça va a continuar, la temporada que viene, jugando al mismo fútbol y fiel a su estilo. El Madrid, para poder ser fiel a un estilo, tendría primero que tener 'un estilo'. Y los rumores, cada vez más intensos, son que Mourinho va a ser el próximo entrenador blanco. Mourinho que, aunque es cierto que sabe a qué juega y cómo ganar partidos difíciles, es el representante de un fútbol muy poco generoso y aún menos hermoso.

La ventaja de ser más que un club es que el Barça lleva tan interiorizado que juega no sólo por obtener un resultado concreto, que la generosidad no es una opción sino un requisito. No es un derecho sino un deber.

El estilo del Barça está asociado a un deseo de belleza, de espectáculo y de grandeza. No busca sólo el triunfo sino que aspira a la gloria. La gran diferencia entre el Barça y el Madrid, acaso la más significativa y la más determinante, es que detrás del Madrid hay un público y detrás del Barça hay un pueblo.

Para un catalán, cuando el Barça juega, es lo mismo que para un español cuando juega España. Un Barça- Madrid no es nunca un Barça-Madrid solamente. Es el Barça contra España, Cataluña contra España. Aunque España prohíbe -en una impresionante demostración de vocación democrática- que las selecciones catalanas puedan competir oficialmente, cada vez que Madrid y Barça se enfrentan Cataluña se enfrenta a España y ese partido es la metáfora de asuntos mucho más profundos. No hay nada tan político como el fútbol, sobretodo en Cataluña y en España. Si El Barça hubiera llegado a la final del Bernabéu, y la hubiera ganado, hubiera sido mucho más que un triunfo deportivo: sólo hacía falta ver el pavor con que imaginaban esta posibilidad muchos madridistas. Y muchos españoles.

Quedan dos jornadas y puede pasar cualquier cosa. Barça y Madrid son dos grandes equipos y los dos tienen grandes jugadores. Aunque creo que no sería en absoluto oportuno ni bueno para nosotros que viniera al Barça, porque aquí jugamos a otra cosa, soy de los que piensa que Cristiano es un gigante. Pero lo que hay en juego en esta y en todas las Ligas, y cada vez que el Madrid y el Barcelona saltan a un terreno de juego, es completamente distinto.

El Madrid sólo busca un triunfo. El Barça, además, cumplir un destino.

domingo, 2 de mayo de 2010

British Patógeno 5: Estudio de las órbitas elípticas de gran excentricidad


Mientras las horas, las nubes y los pájaros del Furzton Lake pasan, a menudo me pongo a pensar en cómo han cambiado las cosas últimamente. Defino "últimamente" como el período que va desde que salí de nuestra querida Facultad de Biología hasta ahora. Todo eso, pasando por el año que estuve trabajando en la misma empresa en la que sigue JugónTrucks (haciendo, entre otras cosas, Status Reports), mi retorno a Madrid (cosa que llevaba muuuucho tiempo deseando, como todos sabíais) y por último el traslado a UK que de momento sigue sin tener fecha de fin. Esto también sabíais que lo quería, seguro que durante nuestros largos años por las clases, laboratorios y pasillos de la Facultad os dije en más de una ocasión que me gustaría vivir una temporada en el extranjero. Lo que no sabía es que dicho deseo se acabaría haciendo realidad; sinceramente, nunca entró en mis previsiones de lo que yo consideraba probable. También hay que decir que mis previsiones a veces se estrellan contra la realidad aparatosamente.



Ya sé que siempre hablo de esto, de cómo han cambiado las cosas (miraos también a vosotros mismos y recorred mentalmente el mismo período que estoy recorriendo yo ahora, ¿no os parecen muchos cambios en poco tiempo?. Cuando estábamos en la Universidad, ¿no os parecía como si esto no fuese a llegar nunca?), pero lo que sucede es que es un tema recurrente porque en casi 9 meses que llevo aquí todavía no ha dejado de asombrarme, aún me levanto muchos días por la mañana y pienso "pero si estoy en Inglaterra, ¿cómo he pasado de levantarme para coger el bus y empezar el interminable camino desde la casa de mis padres hasta la Ciudad Universitaria a esto?". La diferencia es que al principio, las primeras semanas o quizá el primer mes y algo, esa idea me agobiaba, se me clavaba en el pensamiento con la facilidad que tiene un alfiler para atravesar un tejido, y ahora ya no. Siguen siendo días extraños estos, pero ya me he habituado a esa sensación.

Así que, resumiendo, esta ha sido mi (nuestra) vida los últimos años: la Universidad, la vuelta a Madrid, el trabajo, el fin de la carrera, y el traslado a La Isla, con muchas otras cosas en medio.



¿Sabes?. La primera vez que te ví no imaginaba nada de esto. Claro, tu dirás, normal, nadie puede saber lo que va a pasar de antemano, y lo cierto es que tienes razón. Pero lo que quiero decir es que no sólo no lo sabía sino que tampoco me era previsible. Ahí estabas, con todo lo que eso significó, pero siempre pensé que el advenimiento del fin llegaría con la segunda vez que pisara el cielo de la ciudad. Porque, total, era tan difícil, tu planeta y el mío tan distantes en la galaxia. Vale que tengo una nave de largo radio, pero tampoco ocurrió nada que claramente nos moviera a atravesar los años luz y los días. Así que metí las coordenadas de lo que yo pensaba que era simplemente el espacio infinito y vacío.

Pero no. Tardé en darme cuenta, de hecho sólo lo vi claro cuando al cabo del tiempo volví a ver ese puntito brillante en el cristal, de color azul burbuja (ya sabes, esas burbujas impermeables al dolor y con dos plazas). Y cuando lo ví lo supe inmediatamente: tu planeta otra vez. ¿Cómo era posible?. ¡Pero si yo me dirigía hacia la nada!. Y es que claro, estábamos siguiendo una órbita elíptica.



La verdad que es una órbita muy excéntrica (muy alargada, los polos muy alejados del planeta), porque tardar un año y pico en recorrerla es bastante tiempo. Pero el caso es que volvimos a volar en formación por el espacio alrededor del planeta azul. Y ahí fue el advenimiento de la Segunda Sincronización y el reinicio general del Universo que se produce cada vez que nos encontramos. Ya lo sabes, aportamos equilibrio, siempre te lo he dicho. (Mira: el volcán ha dejado de emitir lava, los terremotos han parado, la primavera domina los cielos y las horas).

Total que después de eso, nuevamente el espacio infinito, yo dí la vuelta, volví a poner las mismas coordenadas ("a ver qué pasa") y además me alejé, vaya si me he alejado, ¿eh?, me he ido a tomar por culo sideral. Yo pensaba que ya no me veías. Y de repente un pitido de aviso, "Incoming Shuttle", ¿quién será?, y ahí estás tu con tu navecita, que yo no lo sabía pero te estabas haciendo la órbita entera (lo mismo tú...no lo sabías tampoco). Y a volar en formación, cerca, motor con motor, creo que los reflejos verdes que veo por el cristal son tus ojos brillando con la luz del planeta. Equilibrio.

La verdad, no creo que estemos recorriéndonos estas órbitas para nada. Y, por eso, esta vez en vez de dirigirme al espacio voy a poner otro destino. Tú te has ido, te has dado la vuelta y te has alejado, pero aún te veo por el cristal. Así que sé cuál es el camino, ya tengo el mapita con la órbita y puedo volver a hacerla e incluso recalcularla, a ver si esta vez tardo menos.




Y eso que ya sabes que yo vine sin mapas, nadie me dijo cómo orientarme, nadie me dio un manual de instrucciones ni me explicaron hacia dónde ir. Así que todo cuanto hago: volar, aproximar, aterrizar, despegar, lo he aprendido a hacer solo y lo hago a mi manera. Si quieres, te puedes subir a la nave. Te subes y yo te llevo, esa es la idea, es simple, ¿eh?. O viceversa, lo mismo me da. Y volaremos, volaremos por el espacio, que podrá ser infinito y negro, pero sin duda estará salpicado de estrellas.

La "banda sonora" de este British Patógeno es esta:




Pero por razones históricas es inevitable poner también esta:


sábado, 1 de mayo de 2010

La Caverna Catalanista (III)

Barça: Son y volverán a ser campeones - José Luis Carazo

De color blaugrana. No pasa nada. Si es verdad que el Barça de Pep ha hincado la rodilla en la Champions, pero también lo es que este equipo sabrá levantarse e ir a por todas, más que nunca, a por la Liga. Si es cierto que los blaugrana no andan frescos, que el calendario en el tramo final es perverso para el Barça (seguro que algo tiene que ver el centralismo), pero eso no debe ser óbice para tirar la toalla y no dar el do de pecho hasta el último suspiro de la temporada. El actual campeón sigue viendo a su máximo rival por el espejo retrovisor y ese es un motivo más que suficiente para dejarse de nuevo la piel en los cuatro partidos que restan para el final de temporada.

El madridismo y la caverna mediática al unísono, por fin, respiran aliviados, a sabiendas que la Cibeles puede dormir tranquila. Nos consta que los de La Meseta se frotan las manos porque 50.000 blaugranas no coparán las calles de la capital el próximo día 22 de mayo y dan salto de alegría al percatarse de que el Santiago Bernabéu no vivirá una final azulgrana, pero el Barca tiene en sus botas el poder dejar al Madrid como el gallo de Morón, sin plumas y cacareando, ganando la Liga.

Este título puede dejar tocado, muy tocado a un Madrid que se ha gastado lo que no está en los escritos para confeccionar un equipo campeón y que al final se tendrá que conformar con no llevarse un título a la boca por segundo año consecutivo. Son y volverán a ser campeones.