jueves, 30 de abril de 2009

Dos películas para un cumpleaños

Como algunos sabréis el lunes es mi cumpleaños (vaya forma de promocionarme) y como casi todos los años voy a ver una película al cine. A parte de las ya comentadas, Ponyo en el acantilado y Déjame entrar, hay dos películas que me gustaría ver. Se trata de una comedia romántica alemana, con Til Schweiger (El Rey Arturo) como productor, director y protagonista, y la maravillosa Nora Tschirner. Y del debut de pequeño de los Cuarón, con Diego Luna y Gael García Bernal como emergentes estrellas del fútbol (vuelven a coincidir tras Y tu mama también). ¿Cuál acabaré viendo?

Un conejo sin orejas


Rudo Y Cursi

Celebrities: Bud Spencer


"Que no pase un día sin que deis una hostia, porque hostia que no se da es hostia que se pierde." - Bud Spencer 29/04/2009

domingo, 26 de abril de 2009

Frases Míticas de Biología

No sé el motivo pero el caso es que hoy he estado viendo un poco el video Biological Wars y posteriormente, no sabré deciros la causa he puesto en el buscador de Google el nombre de Marcelino Bañuelos y he acabado en una página en la que aparecen frases míticas de nuestro queridos profesores de la complutense, divididas por facultad y profesor. Aquí van unas de las mejores que he encontrado, no esperéis frases conocidas puesto que esto lo han hecho los de la generación Facebook:

Marcelino Bañuelos:

Primer dia de clase de biologia celular.
Marcelino: Por favor, levantar la mano todos los que seais de primero. Muy bien...pues ahora os levantais y no volveis a aparecer por mi clase"

"Porque Platón NO descubrió la proteína Ras. ¿Aristóteles? No, tampoco Aristóteles."

"Proteína integradora; proteína biomatemática que sabe hacer las integrales muy bien..., se integra mu bien."

"Tras haber hecho el parcial de citología: Marcelino - ¿Quién cree que va a aprobar? (la clase entera se cruza miradas compañeriles asustadizas, y de repente, un alumno le vanta la mano, y Marcelino grita con voz de pito cómicamente: ¿UUUNNNNNNOOOOOOOO????, ¿¿UNNNNNNNOOOOOO!!!!!???, ¿UUUUNNNOOOOO????"

Benjamín Fernandez:

"Yo estuve trabajando hace ya tiempo en Canada, en un pueblecito que estaba lejisimos de la costa atlantica y lejisimos de la costa pacifica. Alli no habia nada y yo tenia dos opciones: Una quedarme todo el dia en leyendo en casa o dos, emborracharme. No llegue a leer ningun libro."

"La piel es sensible, por ejemplo una madre besa a un niño en la frente para ver si tiene fiebre y dice, esta caliente el niño, pero si vosotros besais le decis al otro, estas caliente, y no decis ni niño ni nada, estas caliente..."

"Como todos sabeis Adan fue el primer hombre y el primer socio del Atletico de Madrid"

"El pancreás tiene forma de... esto... asi como... como zapatilla de moro"

Santiago Ipiña:


Ipiña: Por 100€ ¿das tu la clase?
Alumno: Hombre, no se...
Ipiña: ¿que pasa? quieres mas eeeeh ¿¿1000€??? Por 1000€ das tu la regresion, flamenco, y lo que haya que dar..."

Lola Marrodán:

"Un chimpancé pequeñito viene a ser tan feo como un niño pero igual de tierno."

"Desde hace años en Francia llevan una política natalista, y ahora con el Sarkozy este que le va la marcha, pues mas..."

Fernando Vivanco:

"Totalmente serio y en un tono de voz de general de infantería: Hola buenas tardes, hoy vamos a continuar con el tema del cuenchin químico, y ls recomiendo que no se rían de mis gafas, porque son muy chulis!!!"

"(hablando de las centrifugadoras)Lo malo de estos aparatos es que llega el alumno en prácticas, le da al botón y sin esperar a ver si está bien calibrada, se larga a tomar un café. Claro, cuando tu pasas por allí y ves que está vibrando, ya sólo te queda ponerte el DNI en la boca y tirarte al suelo."

Por último hay un tal Elías que no sé a quien se refiere pero yo no he dicho estas frases, esto seguro:

"En 1800, Herschell descompuso la luz con un prisma igual que haría Pink Floyd en 1970"

"Entonces Guglielmo Marconi dijo que iba a mandar un mensaje por radio a EEUU a través del Atlántico. Y le dijeron: 'Pero Gugli tío, que la tierra es redonda y las ondas no pueden atravesarla'. Y Guglielmo dijo: 'Me la suda'"

"En la época griega si un político perdía las elecciones se dedicaba a ser sabio. Sé que sabio y político son dos terminos que hoy día parecen contradictorios, pero era así"

Más en el siguiente enlace:
Frases Míticas de Biología

viernes, 24 de abril de 2009

Artistas

Este es un artículo de Rodolfo Serrano que a todos a los que les guste la música sin artificios agradecerán

Artistas - Rodolfo Serrano

Es algo más que un hecho curioso y que tiene mucho que ver con la atención que los medios dedican a la cultura. Desde hace ya largas semanas, los principales medios nos están hablando de la aparición del último disco de una cantante que, entre sus virtudes, tiene, en la mejor tradicion USA, la de llevar el nombre de un estado norteamericano, escasa voz, vacío en sus mensajes, indumentaria extravagante de quinceañero a sus cuarenta y tantos años, y, sobre todo, un talento indiscutible para la promoción y el compadreo con los profesionales del periodismo. Y, en el fondo, hace bien. Qué coño.

No digo que no sea un fenómeno mediático. Que lo es. Pero es un fenómeno que, como digo, dice mucho sobre la situación de la industria musical. Y sobre los valores que priman en los medios de difusión. En la misma semana he llegado a ver hasta cuatro reseñas (entre entrevistas y artículos) en medios de la misma sociedad de comunicación. Son un misterio las razones que llevan a los profesionales de estos medios a difundir ésta y no otras obras.

Vaya por delante que creo en la libertad de cada uno para actuar según sus propios criterios, aunque choquen con lo que la lógica pide. Y no me atrevo a creer que todo lo muevan otros intereses distintos a los culturales. Pero dicho eso, habría que preguntarse por qué otros artistas que llevan años tratando de sacar la cabeza, trabajando por ofrecer productos de calidad ante la indiferencia de críticos y de empresas de comunicación.

Son chavales y chavalas que llenan los bares con letras y música de calidad, que se editan sus propios discos, que sobreviven valientemente dejándose la piel en cada actuación, en cada canción, en cada CD editado trabajosa y audazmente. Ahí están Manuel Cuesta, Antonio de Pinto, Ángel Petisme, Alfonso del Valle o el propio Marwan o Javiér Álvarez, sólo por citar algunos, que buscan incansables ese vuelo poético y artístico y que no consiguen ni la más mínima reseña o, como en el caso de Álvarez, aparecen más como una curiosidad que como un auténtico suceso informativo y cultural.

No vale decir que la una vende y llena sus conciertos y eso justificaría tanto despliegue, porque difícilmente gente como la citada más arriba tienen la oportunidad de ser conocidos fuera de un reducido ámbito, cuando nunca aparecen en los medios. Si alguno de ellos hubiera tenido la oportunidad de aparecer en portadas de suplemento, en entrevistas radiofónicas o en las tertulias de la tele, probablemente su repercusión sería otra muy distinta.

Cualquiera de los citados aporta bastante más a la reflexión, a la cultura y a la sociedad con una sola canción que las doce o catorce del CD de moda. Pero, en fin. Ellos siempre tendrán esa dignidad de quienes han hecho del arte un oficio y de la canción un instrumento para conseguir una sociedad más humana y para dejar constancia de que algo se mueve en los bares pequeños, en los conciertos de centros culturales, en la poesía. Por mucho que los grandes medios de información quieran ignorarlos y mirarlos por encima del hombro, ellos saben que están en el corazón de mucha gente.

Grande


Sin comentarios

jueves, 23 de abril de 2009

En Porretas

Dos vídeos con un leitmotiv común sacar a la gente en porretas. Tranquilos, sobretodo para aquellos que claman al cielo cada vez que ven un cuerpo desnudo, porque ya sea por unas "barritas negras" muy juguetonas o por un pixelado muy currado (¡hay los pixeles!) no se ve nada del otro mundo. El primer vídeo es de The Brighton Port Authority (The BPA para los amigos), el nuevo proyecto de Norman Cook (o sea, Fatboy Slim). Y el segundo es "Lessons Learned" del grupo Matt & Kim (no os perdáis el final de este, te quedas pizcueto).

Seguro que os hacen gracia y la música no esta nada mal.



miércoles, 22 de abril de 2009

Yo tampoco...

Aquí dejo un chiste por llamarlo de alguna manera que está causando furor en mi curro, o lo odias o lo amas.

Ponyo en el acantilado


No soy objetivo cuando hablo de Hayao Miyazaki, pero el próximo 24 de Abril se estrena en España "Ponyo en el acantilado", la nueva obra maestra del estudio Ghibli. Os parecera muy infantil y antigua, pero nada más lejos de la verdad. Miyazaki es un enamorado de la animación tradicional y con esta nueva película ha querido recuperar el espíritu de "Mi Vecino Totoro" (quizás la mejor película de animación de todos los tiempos).

Bueno aquí os dejo el trailer en español (para los que no estéis estudiando japones) y espero veros en el cine.

Pepe, el anti-futbol

Siempre se ha dicho que un buen central debe ser rápido, fuerte, que vaya bien por arriba y que sepa sacar el balón desde atrás. Estas características muy pocos centrales las tienen y en cuanto uno cambia la rapidez por la amplitud de zancada, la fuerza por la agresividad sin control, el ir bien por arriba por "mis amigos los codos" y sacar el balón desde atrás por patadón para arriba, ya se califica como el mejor central del mundo.

Ayer se vio por fin (ya se venia descubriendo en partidos contra el Recre y el Racing) al verdadero Pepe, apodado en Portugal "Pepe Tijeras". Corría el minuto 86 en el Bernabéu, y el brasileño nacionalizado portugués empujó al jugador del Getafe (Casquero) dentro del área merengue, el árbitro pitó penalty y Pepe propino dos patas seguidas al jugador getafense en el suelo, la primera fue a las piernas y la segunda dió en la espalda y pasó cerca de la cabeza. No contento con eso, al ver que había pitado penalty el árbitro, se fue para el jugador postrado en el suelo y de zarandeó agarrándole de un brazo.

Cuando todos se quedaban atónitos por lo que ocurría, e intentaban separar a Pepe, este lanzó un puñetazo a la cara de otro jugador del Getafe que pretendía separarlos (Albin). Se armó cierta tangana, que no fue a más y Pepe acabó fuera del terreno de juego, no sin antes dirigirse al cuarto árbitro con unas bonitas palabras "Sois todos unos hijos de puta".

Sin entrar a valorar lo que pasó después (no es el tema de este post), al marcar Higuaín (¿por qué no lo llama Maradona?) el gol del triunfo del Madrid, Pepe entró de nuevo al campo para abrazarse a sus compañeros, cuando esta totalmente prohibido que un jugador expulsado vuelva a entrar al campo, sobretodo, estando el partido en juego.

Las imágenes que acompañan al post quizás sean más elocuentes que mis palabras, pero las palabras de Pepe después del partido en la zona mixta del Santiago Bernabeu, no dejan lugar a dudas. En ellas Pepe inconscientemente dice que no ha tenido tiempo de disculparse con Casquero porque le han dicho que tiene que salir ha hablar con los medios. Es decir, que al señor Pepe le han obligado a dar la cara, no ha salido de él.



Las declaraciones o impresiones de implicados y aficionados no se han hecho esperar:

Juande Ramos, entrenador del Real Madrid: "Pepe se ha cabreado cuando ha visto el penalty y quería dar patadas al aire, no al jugador. Estoy convencido de que el Comité verá que Pepe perdió los nervios y no quería dar una patada. Ha perdido los nervios consigo mismo. Se ha vuelto loco con él mismo"

Aficionado en un foro de MARCA: "Ja, ja, ja, ja, ja,... con más jugadores como Pepe nadie nos tosería ni se atreberian a acercarse por el area sin el dodotis puesto. Y el que hosase hacerlo sabe que se iba a ir caliente por bacilon. Juagdores de la talla internacional de Pepe son los que le dan prestrigio al Real Madrid por su entrega y amor incondicional al Club, el mas grande del siglo 20. Chapó Pepe por tu accion. Tienes una cerveza pagada cuando nos veamos. Y por cierto al arvitro ahi que castigarlo por perseguidor contra el Real Madrid y por fantasear con el acta arvitral. Y a Pepe ahi que hacerle un homenaje y darle una prima por ser ejemplo para los chabales que crecen en la cantera del Madrid como ejemplo de pundonor y honor. Sangre y honor. Pepe deve ser absuelto por ser inocente de las mentiras del arvitro. Arriba Real Madrid!!!!!"

Álvarez segundo de Juande: "después del partido ante el Barça estaremos por delante"

Yo me pregunto, para todos aquellos madridistas que disculpan la actuación de Pepe o incluso la vitorean, que si en lugar de Casquero fuera Zidane y en lugar de Pepe fuera Materazzi ¿qué opinarían?

viernes, 17 de abril de 2009

Carta a una señorita en París

Ya sé que soy un pesadito, pero últimamente estoy leyendo cositas de Julio Cortázar y me está gustando bastante, por su surrealismo sobre todo, creo que al Tipejo le gustará este autor como buen lynchero que es, eso sí, si se mete en el blog.

Carta a una señorita en París - Julio Cortázar

Andrée, yo no quería venirme a vivir a su departamento de la calle Suipacha. No tanto por los conejitos, más bien porque me duele ingresar en un orden cerrado, construido ya hasta en las más finas mallas del aire, esas que en su casa preservan la música de la lavanda, el aletear de un cisne con polvos, el juego del violín y la viola en el cuarteto de Rará. Me es amargo entrar en un ámbito donde alguien que vive bellamente lo ha dispuesto todo como una reiteración visible de su alma, aquí los libros (de un lado en español, del otro en francés e inglés), allí los almohadones verdes, en este preciso sitio de la mesita el cenicero de cristal que parece el corte de una pompa de jabón, y siempre un perfume, un sonido, un crecer de plantas, una fotografía del amigo muerto, ritual de bandejas con té y tenacillas de azúcar... Ah, querida Andrée, qué difícil oponerse, aun aceptándolo con entera sumisión del propio ser, al orden minucioso que una mujer instaura en su liviana residencia. Cuán culpable tomar una tacita de metal y ponerla al otro extremo de la mesa, ponerla allí simplemente porque uno ha traído sus diccionarios ingleses y es de este lado, al alcance de la mano, donde habrán de estar. Mover esa tacita vale por un horrible rojo inesperado en medio de una modulación de Ozenfant, como si de golpe las cuerdas de todos los contrabajos se rompieran al mismo tiempo con el mismo espantoso chicotazo en el instante más callado de una sinfonía de Mozart. Mover esa tacita altera el juego de relaciones de toda la casa, de cada objeto con otro, de cada momento de su alma con el alma entera de la casa y su habitante lejana. Y yo no puedo acercar los dedos a un libro, ceñir apenas el cono de luz de una lámpara, destapar la caja de música, sin que un sentimiento de ultraje y desafio me pase por los ojos como un bando de gorriones.

Usted sabe por qué vine a su casa, a su quieto salón solicitado de mediodía. Todo parece tan natural, como siempre que no se sabe la verdad. Usted se ha ido a París, yo me quedé con el departamento de la calle Suipacha, elaboramos un simple y satisfactorio plan de mutua convivencia hasta que septiembre la traiga de nuevo a Buenos Aires y me lance a mí a alguna otra casa donde quizá... Pero no le escribo por eso, esta carta se la envío a causa de los conejitos, me parece justo enterarla; y porque me gusta escribir cartas, y tal vez porque llueve.

Me mudé el jueves pasado, a las cinco de la tarde, entre niebla y hastío. He cerrado tantas maletas en mi vida, me he pasado tantas horas haciendo equipajes que no llevaban a ninguna parte, que el jueves fue un día lleno de sombras y correas, porque cuando yo veo las correas de las valijas es como si viera sombras, elementos de un látigo que me azota indirectamente, de la manera más sutil y más horrible. Pero hice las maletas, avisé a la mucama que vendría a instalarme, y subí en el ascensor. Justo entre el primero y segundo piso sentí que iba a vomitar un conejito. Nunca se lo había explicado antes, no crea que por deslealtad, pero naturalmente uno no va a ponerse a explicarle a la gente que de cuando en cuando vomita un conejito. Como siempre me ha sucedido estando a solas, guardaba el hecho igual que se guardan tantas constancias de lo que acaece (o hace uno acaecer) en la privacía total. No me lo reproche, Andrée, no me lo reproche. De cuando en cuando me ocurre vomitar un conejito. No es razón para no vivir en cualquier casa, no es razón para que uno tenga que avergonzarse y estar aislado y andar callándose.

Cuando siento que voy a vomitar un conejito me pongo dos dedos en la boca como una pinza abierta, y espero a sentir en la garganta la pelusa tibia que sube como una efervescencia de sal de frutas. Todo es veloz e higiénico, transcurre en un brevísimo instante. Saco los dedos de la boca, y en ellos traigo sujeto por las orejas a un conejito blanco. El conejito parece contento, es un conejito normal y perfecto, sólo que muy pequeño, pequeño como un conejilo de chocolate pero blanco y enteramente un conejito. Me lo pongo en la palma de la mano, le alzo la pelusa con una caricia de los dedos, el conejito parece satisfecho de haber nacido y bulle y pega el hocico contra mi piel, moviéndolo con esa trituración silenciosa y cosquilleante del hocico de un conejo contra la piel de una mano. Busca de comer y entonces yo (hablo de cuando esto ocurría en mi casa de las afueras) lo saco conmigo al balcón y lo pongo en la gran maceta donde crece el trébol que a propósito he sembrado. El conejito alza del todo sus orejas, envuelve un trébol tierno con un veloz molinete del hocico, y yo sé que puedo dejarlo e irme, continuar por un tiempo una vida no distinta a la de tantos que compran sus conejos en las granjas.

Entre el primero y segundo piso, Andrée, como un anuncio de lo que sería mi vida en su casa, supe que iba a vomitar un conejito. En seguida tuve miedo (¿o era extrañeza? No, miedo de la misma extrañeza, acaso) porque antes de dejar mi casa, sólo dos días antes, había vomitado un conejito y estaba seguro por un mes, por cinco semanas, tal vez seis con un poco de suerte. Mire usted, yo tenía perfectamente resuelto el problema de los conejitos. Sembraba trébol en el balcón de mi otra casa, vomitaba un conejito, lo ponía en el trébol y al cabo de un mes, cuando sospechaba que de un momento a otro... entonces regalaba el conejo ya crecido a la señora de Molina, que creía en un hobby y se callaba. Ya en otra maceta venía creciendo un trébol tierno y propicio, yo aguardaba sin preocupación la mañana en que la cosquilla de una pelusa subiendo me cerraba la garganta, y el nuevo conejito repetía desde esa hora la vida y las costumbres del anterior. Las costumbres, Andrée, son formas concretas del ritmo, son la cuota del ritmo que nos ayuda a vivir. No era tan terrible vomitar conejitos una vez que se había entrado en el ciclo invariable, en el método. Usted querrá saber por qué todo ese trabajo, por qué todo ese trébol y la señora de Molina. Hubiera sido preferible matar en seguida al conejito y... Ah, tendría usted que vomitar tan sólo uno, tomarlo con dos dedos y ponérselo en la mano abierta, adherido aún a usted por el acto mismo, por el aura inefable de su proximidad apenas rota. Un mes distancia tanto; un mes es tamaño, largos pelos, saltos, ojos salvajes, diferencia absoluta Andrée, un mes es un conejo, hace de veras a un conejo; pero el minuto inicial, cuando el copo tibio y bullente encubre una presencia inajenable... Como un poema en los primeros minutos, el fruto de una noche de Idumea: tan de uno que uno mismo... y después tan no uno, tan aislado y distante en su llano mundo blanco tamaño carta.

Me decidí, con todo, a matar el conejito apenas naciera. Yo viviría cuatro meses en su casa: cuatro -quizá, con suerte, tres- cucharadas de alcohol en el hocico. (¿Sabe usted que la misericordia permite matar instantáneamente a un conejito dándole a beber una cucharada de alcohol? Su carne sabe luego mejor, dicen, aunque yo... Tres o cuatro cucharadas de alcohol, luego el cuarto de baño o un piquete sumándose a los desechos.)

Al cruzar el tercer piso el conejito se movía en mi mano abierta. Sara esperaba arriba, para ayudarme a entrar las valijas... ¿Cómo explicarle que un capricho, una tienda de animales? Envolví el conejito en mi pañuelo, lo puse en el bolsillo del sobretodo dejando el sobretodo suelto para no oprimirlo. Apenas se movía. Su menuda conciencia debía estarle revelando hechos importantes: que la vida es un movimiento hacia arriba con un clic final, y que es también un cielo bajo, blanco, envolvente y oliendo a lavanda, en el fondo de un pozo tibio.

Sara no vio nada, la fascinaba demasiado el arduo problema de ajustar su sentido del orden a mi valija-ropero, mis papeles y mi displicencia ante sus elaboradas explicaciones donde abunda la expresión «por ejemplo». Apenas pude me encerré en el baño; matarlo ahora. Una fina zona de calor rodeaba el pañuelo, el conejito era blanquísimo y creo que más lindo que los otros. No me miraba, solamente bullía y estaba contento, lo que era el más horrible modo de mirarme. Lo encerré en el botiquín vacío y me volví para desempacar, desorientado pero no infeliz, no culpable, no jabonándome las manos para quitarles una última convulsión.

Comprendí que no podía matarlo. Pero esa misma noche vomité un conejito negro. Y dos días después uno blanco. Y a la cuarta noche un conejito gris.

Usted ha de amar el bello armario de su dormitorio, con la gran puerta que se abre generosa, las tablas vacías a la espera de mi ropa. Ahora los tengo ahí. Ahí dentro. Verdad que parece imposible; ni Sara lo creería. Porque Sara nada sospecha, y el que no sospeche nada procede de mi horrible tarea, una tarea que se lleva mis días y mis noches en un solo golpe de rastrillo y me va calcinando por dentro y endureciendo como esa estrella de mar que ha puesto usted sobre la bañera y que a cada baño parece llenarle a uno el cuerpo de sal y azotes de sol y grandes rumores de la profundidad.

De día duermen. Hay diez. De día duermen. Con la puerta cerrada, el armario es una noche diurna solamente para ellos, allí duermen su noche con sosegada obediencia. Me llevo las llaves del dormitorio al partir a mi empleo. Sara debe creer que desconfío de su honradez y me mira dubitativa, se le ve todas las mañanas que está por decirme algo, pero al final se calla y yo estoy tan contento. (Cuando arregla el dormitorio, de nueve a diez, hago ruido en el salón, pongo un disco de Benny Carter que ocupa toda la atmósfera, y como Sara es también amiga de saetas y pasodobles, el armario parece silencioso y acaso lo esté, porque para los conejitos transcurre ya la noche y el descanso.)

Su día principia a esa hora que sigue a la cena, cuando Sara se lleva la bandeja con un menudo tintinear de tenacillas de azúcar, me desea buenas noches -sí, me las desea, Andrée, lo más amargo es que me desea las buenas noches- y se encierra en su cuarto y de pronto estoy yo solo, solo con el armario condenado, solo con mi deber y mi tristeza.

Los dejo salir, lanzarse ágiles al asalto del salón, oliendo vivaces el trébol que ocultaban mis bolsillos y ahora hace en la alfombra efímeras puntillas que ellos alteran, remueven, acaban en un momento. Comen bien, callados y correctos, hasta ese instante nada tengo que decir, los miro solamente desde el sofá, con un libro inútil en la mano -yo que quería leerme todos sus Giraudoux, Andrée, y la historia argentina de López que tiene usted en el anaquel más bajo-; y se comen el trébol.

Son diez. Casi todos blancos. Alzan la tibia cabeza hacia las lámparas del salón, los tres soles inmóviles de su día, ellos que aman la luz porque su noche no tiene luna ni estrellas ni faroles. Miran su triple sol y están contentos. Así es que saltan por la alfombra, a las sillas, diez manchas livianas se trasladan como una moviente constelación de una parte a otra, mientras yo quisiera verlos quietos, verlos a mis pies y quietos -un poco el sueño de todo dios, Andrée, el sueño nunca cumplido de los dioses-, no así insinuándose detrás del retrato de Miguel de Unamuno, en torno al jarrón verde claro, por la negra cavidad del escritorio, siempre menos de diez, siempre seis u ocho y yo preguntándome dónde andarán los dos que faltan, y si Sara se levantara por cualquier cosa, y la presidencia de Rivadavia que yo quería leer en la historia de López.

No sé cómo resisto, Andrée. Usted recuerda que vine a descansar a su casa. No es culpa mía si de cuando en cuando vomito un conejito, si esta mudanza me alteró también por dentro -no es nominalismo, no es magia, solamente que las cosas no se pueden variar así de pronto, a veces las cosas viran brutalmente y cuando usted esperaba la bofetada a la derecha-. Así, Andrée, o de otro modo, pero siempre así.

Le escribo de noche. Son las tres de la tarde, pero le escribo en la noche de ellos. De día duermen ¡Qué alivio esta oficina cubierta de gritos, órdenes, máquinas Royal, vicepresidentes y mimeógrafos! Qué alivio, qué paz, qué horror, Andrée! Ahora me llaman por teléfono, son los amigos que se inquietan por mis noches recoletas, es Luis que me invita a caminar o Jorge que me guarda un concierto. Casi no me atrevo a decirles que no, invento prolongadas e ineficaces historias de mala salud, de traducciones atrasadas, de evasión Y cuando regreso y subo en el ascensor ese tramo, entre el primero y segundo piso me formulo noche a noche irremediablemente la vana esperanza de que no sea verdad.

Hago lo que puedo para que no destrocen sus cosas. Han roído un poco los libros del anaquel más bajo, usted los encontrará disimulados para que Sara no se dé cuenta. ¿Quería usted mucho su lámpara con el vientre de porcelana lleno de mariposas y caballeros antiguos? El trizado apenas se advierte, toda la noche trabajé con un cemento especial que me vendieron en una casa inglesa -usted sabe que las casas inglesas tienen los mejores cementos- y ahora me quedo al lado para que ninguno la alcance otra vez con las patas (es casi hermoso ver cómo les gusta pararse, nostalgia de lo humano distante, quizá imitación de su dios ambulando y mirándolos hosco; además usted habrá advertido -en su infancia, quizá- que se puede dejar a un conejito en penitencia contra la pared, parado, las patitas apoyadas y muy quieto horas y horas).

A las cinco de la mañana (he dormido un poco, tirado en el sofá verde y despertándome a cada carrera afelpada, a cada tintineo) los pongo en el armario y hago la limpieza. Por eso Sara encuentra todo bien aunque a veces le he visto algún asombro contenido, un quedarse mirando un objeto, una leve decoloración en la alfombra y de nuevo el deseo de preguntarme algo, pero yo silbando las variaciones sinfónicas de Franck, de manera que nones. Para qué contarle, Andrée, las minucias desventuradas de ese amanecer sordo y vegetal, en que camino entredormido levantando cabos de trébol, hojas sueltas, pelusas blancas, dándome contra los muebles, loco de sueño, y mi Gide que se atrasa, Troyat que no he traducido, y mis respuestas a una señora lejana que estará preguntándose ya si... para qué seguir todo esto, para qué seguir esta carta que escribo entre teléfonos y entrevistas.

Andrée, querida Andrée, mi consuelo es que son diez y ya no más. Hace quince días contuve en la palma de la mano un último conejito, después nada, solamente los diez conmigo, su diurna noche y creciendo, ya feos y naciéndoles el pelo largo, ya adolescentes y llenos de urgencias y caprichos, saltando sobre el busto de Antinoo (¿es Antinoo, verdad, ese muchacho que mira ciegamente?) o perdiéndose en el living, donde sus movimientos crean ruidos resonantes, tanto que de allí debo echarlos por miedo a que los oiga Sara y se me aparezca horripilada, tal vez en camisón -porque Sara ha de ser así, con camisón- y entonces... Solamente diez, piense usted esa pequeña alegría que tengo en medio de todo, la creciente calma con que franqueo de vuelta los rígidos cielos del primero y el segundo piso.

Interrumpí esta carta porque debía asistir a una tarea de comisiones. La continúo aquí en su casa, Andrée, bajo una sorda grisalla de amanecer. ¿Es de veras el día siguiente, Andrée? Un trozo en blanco de la página será para usted el intervalo, apenas el puente que une mi letra de ayer a mi letra de hoy. Decirle que en ese intervalo todo se ha roto, donde mira usted el puente fácil oigo yo quebrarse la cintura furiosa del agua, para mí este lado del papel, este lado de mi carta no continúa la calma con que venía yo escribiéndole cuando la dejé para asistir a una tarea de comisiones. En su cúbica noche sin tristeza duermen once conejitos; acaso ahora mismo, pero no, no ahora. En el ascensor, luego, o al entrar; ya no importa dónde, si el cuándo es ahora, si puede ser en cualquier ahora de los que me quedan.

Basta ya, he escrito esto porque me importa probarle que no fui tan culpable en el destrozo insalvable de su casa. Dejaré esta carta esperándola, sería sórdido que el correo se la entregara alguna clara mañana de París. Anoche di vuelta los libros del segundo estante, alcanzaban ya a ellos, parándose o saltando, royeron los lomos para afilarse los dientes -no por hambre, tienen todo el trébol que les compro y almaceno en los cajones del escritorio. Rompieron las cortinas, las telas de los sillones, el borde del autorretrato de Augusto Torres, llenaron de pelos la alfombra y también gritaron, estuvieron en círculo bajo la luz de la lámpara, en círculo y como adorándome, y de pronto gritaban, gritaban como yo no creo que griten los conejos.

He querido en vano sacar los pelos que estropean la alfombra, alisar el borde de la tela roída, encerrarlos de nuevo en el armario. El día sube, tal vez Sara se levante pronto. Es casi extraño que no me importe verlos brincar en busca de juguetes. No tuve tanta culpa, usted verá cuando llegue que muchos de los destrozos están bien reparados con el cemento que compré en una casa inglesa, yo hice lo que pude para evitarle un enojo... En cuanto a mí, del diez al once hay como un hueco insuperable. Usted ve: diez estaba bien, con un armario, trébol y esperanza, cuántas cosas pueden construirse. No ya con once, porque decir once es seguramente doce, Andrée, doce que serán trece. Entonces está el amanecer y una fría soledad en la que caben la alegría, los recuerdos, usted y acaso tantos más. Está este balcón sobre Suipacha lleno de alba, los primeros sonidos de la ciudad. No creo que les sea difícil juntar once conejitos salpicados sobre los adoquines, tal vez ni se fijen en ellos, atareados con el otro cuerpo que conviene llevarse pronto, antes de que pasen los primeros colegiales.

Obi Wan que estás en los cielos

Según informa la BBC, diez agentes del cuerpo de policía del grupo especial de Strathclyde, uno de los más importantes de Reino Unido, han hecho público que su religión es la fe Jedi. La tendencia religiosa de estos policías se descubrió a través de un formulario solicitado durante un examen.

Desde ese momento, el grupo de Strathclyde se ha convertido no sólo en el más grande de Escocia e importante de Reino Unido, sino también en el primero de la historia que acepta Jedi entre sus filas.

Según un portavoz de la policía de Strathclyde 10 de sus miembros -8 agentes y dos funcionarios- marcaron la fe Jedi como religión: "En el momento de la solicitud, 10 ha registrado su religión como Jedi.

En Inglaterra y Gales existen 390.000 personas registradas como pertenecientes a esta religión, mientras que en Escocia es de 14.000 personas. Esta religión, creada hace un año por los hermanos Barney y Daniel Jones, está reconocido por la Oficina Nacional de Estadística dentro del grupo de los ateos.

jueves, 16 de abril de 2009

I Love Hugh

El programa de El Hormiguero del pasado Martes 14 de Abril tuvo como invitado a Hugh Jackman (actualmente el hombre más sexy del planeta) a proposito del estreno de “X-Men Origins: Wolverine” el próximo día 30 de Abril en los mejores cines (nunca en los peores). A mi me pilló viendo el Bayern-Barça de 1/4 de final de la Champions (1-1) y casi me lo pierdo, y digo casi porque acabé zappeando rendido ante el genial Hugh. Yo que tuvé el placer de verlo presentar la última ceremonia de los Oscar, puedo decir que es el mejor showman de la televisión actualemente, es gracioso, guapo, participativo, 100% implicado,... increible.

Os dejó una serie de vídeos que he encontrado en Youtube que, viéndolos en orden, permiten disfrutar del programa prácticamente integro. A disfrutar (no os perdáis los momentos que comparte con Flypi y con las hormigas)









miércoles, 15 de abril de 2009

Efesto Utóptico (2)

Parece que los periodistas del periódico Publico son unos jachondos. En esa foto podemos ver como el gran Pepiño Blanco hace mucho por "fomentar" el buen rollo entre el Ministerio de Fomento y la Espe

sábado, 11 de abril de 2009

So 90´s: Iris

Hace un año fue la boda de mi primo y en un video conmemorativo proyectado durante el banquete-cebatil sonó una canción que me gustó bastante pero no logré identificar de que grupo se trataba. Días después, esperando al despegue del avión que me traería del bonito viaje a Lisboa volví a escuchar este tema. Desde entonces he querido saber, saber y sólo saber!! y por fin la respuesta ha llegado a mi lóbulo frontal, se trata de Iris de Goo Goo Dolls. Yo los desconocía por completo, quizás Totoro conozca más de este grupo.

jueves, 9 de abril de 2009

Déjame entrar (Let the Right One In)

Oskar, un joven tímido de 12 años, aterrorizado por unos matones, se hace amigo de Eli, una misteriosa vecina, cuya llegada coincide con una serie de misteriosas muertes. A pesar de que el joven piensa que ella es un vampiro, intenta que su amistad esté por encima de su miedo.

"Un cuento de Hadas glacial, delicado, atormentado y poético" Guillermo del Toro.

"La mejor película de Sitges, de lejos" El PAÍS.



El 17 de Abril estreno en España.

Granada Bonica

Granada es una ciudad sorprendente, desde Patógenos a la Deriva recomendamos una visita anual en Hostales de mejor calidad que el Hostal Atenas.






Granada Lynchera

¡¡Ayyy Mamasita!! me voy unos días de vacaciones y este blog no avanza, ¡¡Vaamos ¿Tú te crees?. Bueno aquí dejo unas foticos de Granada un tanto Lyncheras, en la siguiente colgaré las fotos bonitas, bonitas, pero bonitas




viernes, 3 de abril de 2009

Crash Tv

Esta noticia le va a encantar a Totoro, creo que esta serie te va a gustar más que Perdidos. Se prepara una serie llamada Crash , basada en la película ganadora de un Oscar con el mismo nombre. La serie está dirigida por el director de la película Paul Haggis, que ya pensó que el argumento podría ser para una serie de televisión. No tardará en llegar a España, calma Totoro, calma

Efesto Utóptico

Hoy en el periódico Público es noticia que Arantza Quiroga (PP) ha sido elegida presidenta del Parlamento Vasco para la novena legislatura por mayoría absoluta, con los votos de PSE-EE y PP. Ya sabemos que los medios de comunicación son amantes del doble sentido y de utilizar todo tipo de medios para vender una noticia. Por la foto se diría que Arantza y Antonio Basagoiti son más que compañeros de partido

Proyecto Friki

Cuando estábamos en le facultad esta convencido de que conseguiríamos hacer algo juntos, no se, crear algo. Pero viendo como van nuestras carreras profesionales, unos destinados a estar toda su vida delante del ordenador y otros destinados a soportar a mostruitos día si y día también, cada vez lo veo más crudo. Por eso al ver trailers como este, creados por simples aficionados me da mucha envidia. Cierto es que no es nada del otro mundo y que se seguramente sean mucho más frikis que nosotros (salvando a George) pero da cosica.

Los fans de los cómics conocerán de la existencia de una pequeña saga llamada Marvel Zombies donde un virus ha transformado a los superhéroes en devoradores de carne humana. Pues bien, varios fans de se han unido para hacer un trailer sobre una supuesta película. En él podemos ver a Spiderman, Hulk e incluso hasta el Capitán América transformados en Zombies.


jueves, 2 de abril de 2009

Isn't it Time Someone Called Cut?

Keira Knightley protagoniza un spot contra la violencia doméstica/de género y no pasa desapercibido. Pensar que una sola persona pueda estar viviendo lo que mismo que le sucede a Keira en el clip, mientras tu estas delante del pc viendo o leyendo cualquier cosa, da que pensar. Pero lo crudo es que no es una sola persona, sino que son cientos. La publicidad tiene también su lado bueno, no?

miércoles, 1 de abril de 2009

El Mascle Ratapinyada (Cavaller Fosc 2)

Esta entrada va dedicada a Totoro que no se creía que Batman fuese a realizar una paradita en Barcelona. El viaje inédito del héroe murciélago a Barcelona ya tiene portada, en la que, con pose de héroe y capa al viento, se planta frente a las torres de la Sagrada Familia, emblema número 1 de la ciudad. Esta primera plana cuenta con el sello de Jim Lee, mito viviente del cómic, que pone su firma así en esta nueva aventura. El contenido al completo se descubrirá en el próximo Salón del Cómic de Barcelona y saldrá a la venta simultáneamente en Estados Unidos, España e Italia el 29 de mayo. En este caso el Joker se llamaría Comodí

Síndrome "Pop"

Desde el disco Pop de U2 se han venido dando cambios de registro de multitud de grupos, con el objetivo, quizás, de ampliar su rango de acción. Ahora les toca a Kassabian con su tercer disco (como recientemente Yeah Yeah Yeahs). Su álbum, ‘West Rider Pauper Lunatic Asylum’, que toma su nombre de un psiquiátrico del siglo XIX, se publicará el 8 de junio, pero de momento podemos disfrutar de ‘Vlad The Impaler’, que podrían haber firmado Primal Scream. El vídeo, un homenaje al cine de terror, muy acorde con el nombre del álbum, está protagonizado por un cómico británico, Noel Fielding.


Kasabian - Vlad the Impaler from Kasabian on Vimeo.

¿Os acordáis de algún grupo más?